En Marisa, todo es viveza y expresión: habla, mucho y bien, expresando todo lo que se le pasa por la cabeza, siempre con una sonrisa en la cara. Tres rasgos la definen especialmente: valenciana, creyente y muy familiar. Adora a su gente, en concreto a sus tres nietos con los que disfruta de una estrechísima relación. Marisa podría haber sido periodista, o profesora (como lo hubiera gustado) pero afortunadamente la vida (y una amiga especial) le llevó a recalar en estas clases de Medios de Comunicación. Y nosotros nos felicitamos por ello. Marisa es alegría, luz y conversación. Si la conocieras, seguro que la invitarías a tomar un café, y ella seguro que llevaba una tarta. (La entrevistamos una tarde soleada del mes de noviembre y esto fue lo que le preguntaron sus compañeras de actividad)
(MªCarmen) Antes que nada, sé de tu afición por el equipo del Levante ¿de dónde viene?
Desde pequeña por mis padres y mis tíos. He viajado por pueblos siguiendo al Levante, sólo para verlos. Además llevaba la gorra puesta, lo cual me ha causado más de una anécdota.
(Pilar) ¿Cuándo decidiste apuntarte a esta actividad de Medios de Comunicación?
Gracias a una amiga. Me sentía mal y me dijo "te vas a venir conmigo". Hablé con la profe de entonces... y aquí estoy. La verdad es que venir aquí me ha ayudado muchísimo. El mundo de los medios es un tema muy abierto, en clase tratamos asuntos dispares porque de todo hay que saber para opinar.
(Elvira) Esto del mundo de los Medios no te pilla de lejos, tu marido trabajó en la Asociación de la Prensa Valenciana ¿es así? ¿De ahí viene tu interés por la información?
Sí, es cierto, pero antes que eso ya en mi casa, como mi padre hacía aparatos de radio, estábamos en contacto con la información todo el día. Luego al casarme en mi casa se compraba el periódico todos los días.
(Elvira M.) Me ha llamado la atención que has comentado alguna vez que escuchas mucha radio e incluso hablas con ella, es decir contestas a cosas que dicen...
Es que te incitan a contestar, estés de acuerdo o desacuerdo. Mi hija me dice a veces, que me calle, tendrías que verme. Igual me pasa en los partidos de fútbol.
(Isabel) De no dedicarte plenamente a tu casa, ¿qué actividad profesional te hubiera gustado desarrollar?
Mi ilusión hubiera sido ser profesora. Me gusta mucho transmitir conocimientos, información.
¿Y por qué no lo fuistes?
A mi padre no le venía bien, y yo he sido siempre muy obediente (risas). A lo mejor, en los tiempos actuales me hubiera rebelado.
(Angelina) Tienes locura por tus nietos ¿verdad?
Sí, tengo tres: Paula, Marcos y María. El chico es un encanto, Paula es muy aplicada y la pequeña está supergraciosa.
(Julia) Cambiando de tema, te voy a hacer una típica pregunta periodística ¿Que tres cosas te llevarías a una isla desierta?
Es una pregunta un poco fatídica porque no me gusta estar sola... Pero mira te contestaré: me llevaría una cruz primeramente porque soy creyente, y luego haría una rueda entre mis allegados para ver quién me quiere acompañar (ríe).
(MªCarmen) Eres muy creyente, ¿cómo vives en tu día a día la religión?
Con intensidad, con fe día a día, una fe que va creciendo en contacto con la gente, intentando no hacer daño a los demás, respetando siempre. Yo soy de la opinión que la fe no se transmite, se tiene y con el tiempo se va desarrollando.
(Elvira R.) A propósito, te voy a hacer una proposición ¿te vienes en junio a Lourdes conmigo?
Me gustaría pero no voy a ir. En este momento no voy a ir, y es que en ese preciso mes...¡¡Se casa mi hijo!!